"Aprender desde la infotoxicación a la gestión de la información"

                                                          

                                                                           Stuart Miles – FreeDigitalPhotos

Otra semana (o algo más) interesante. Esta vez el tema ha versado sobre la sobrecarga de información y la gestión de la misma. Y digo interesante, porque, preparando esta tercera unidad,  he comprendido  que esa sensación de frustración, fatiga, pérdida de atención,..., y todo lo que ya sabemos que ocurre, tiene un nombre "sobrecarga informativa", y que por lo que he podido ver la sufrimos muchos.

Como ya comenté en este blog, no hace mucho que me he introducido en este mundo, y he de reconocer que aunque apasionante, a veces me he sentido totalmente desbordada, saltando de una herramienta a otra, sin profundizar en ninguna, moviéndome de facebook a twitter, queriendo consumir todo lo que  llegaba y sin poderlo digerir, con lo cual estaba "empachada". Esta unidad me ha servido para replantearme el tema y tomar conciencia de la necesidad y la importancia de filtrar, seleccionar, elegir, en definitiva, gestionar la cantidad de información que me llega.

Una de las actividades consistía en buscar información cuya temática fuera la problemática asociada a la gestión de la sobreabundancia de información que ofrece internet, y estrategias para mejorar esta gestión. Pues bien, me ha gustado mucho cómo define Javier Velilla este término y los consejos que da. Podemos verlo en este vídeo.

  
En este otro vídeo dice cosas como las siguientes:
"Hay demasiadas cosas, la oferta y la demanda no se rigen por qué productos ofrezco, sino por la economía de la atención. El tiempo es tan caro que es la variable económica clave".
Es decir, internet nos da miles de contenidos , mucha información, y lo escaso no es la información, sino mi tiempo, y como dice Velilla, "por eso es relevante hablar de infotoxicación".

Velilla compara la infotoxicación con la dieta.  "La industria alimentaria ha descubierto que hay calorías baratas (hamburguesas,...) que se pueden comer por muy poco dinero, pero son calorías sin contenido. Pues bien, lo que estamos viviendo ahora son contenidos vacíos".

Y se pregunta, "¿lo que leemos es realmente relevante, tiene autoridad, nos sirve?"

Además de otros consejos, recomienda el libro   "The Information Diet" de Clay Jhonson, que fue el primero en hablar de "dieta informativa", y en el que da consejos para llevar a cabo un consumo más consciente de la información.

       Infoxicación: cuando la respuesta no es tecnológica, sino cultural a cargo de Javier Velilla

En cuanto a las lecturas y reflexiones que he llevado a cabo, me han gustado especialmente dos (aunque estoy segura de que no he leído miles de buenas reflexiones), la de  de María Calvo , en su artículo http://buscandonadanuevo.blogspot.com.es/2014/01/infoxicacion-information-overload-como.html , en el que plantea la infotoxicación como una oportunidad, en lugar de como un problema, y la de Toni Solano que en su artículo Redundancia nos habla de cómo la redundancia garantiza la llegada de los mensajes. En ellos veo una forma distinta e interesante de analizar el concepto de sobrecarga informativa.

Por tanto, del trabajo en esta unidad me han quedado claras dos cosas,  darme cuenta de que en muchas ocasiones lo que me ocurría es que estaba infotoxicada, y la necesidad de gestionar esa información que me llega.

En la actividad final se nos pide una propuesta de herramientas para mejorar la gestión de la información y cómo la utilizaría con mi alumnado. Sin embargo, tal y como dije en  #eduPLEchat , para poder trabajar con los alumnos, primero tienen que aprender los profesores.

Y eso es lo que yo pretendo, o por lo menos lo intento. Algunas de las estrategias que he seguido hasta ahora han sido:
- Seguir y aprender de personas que saben mucho de estos temas y comparten sus saberes. Dentro de mi ámbito profesional, la orientación educativa, me han sido de gran ayuda profesionales como Víctor Cuevas o Alberto del Mazo .Estos son algunos de sus trabajos de los que he aprendido, y que nos llevan directamente al tema de la necesidad de organizar la información y gestionar el tiempo y las tareas.

Herramientas básicas para mejorar la productividad de los orientadores o no  (Víctor Cuevas).

Blog de Alberto del Mazo con información muy extensa y de gran calidad sobre PLEs para orientadores (y mucho más).

- Participar en grupos de   facebook
- Seguir personas de mi interés en   twitter
- Herramientas como feedly , diigo , pocket , symbaloo

Finalmente, como propuestas de herramientas para mejorar la gestión de la información y cómo las utilizaría con los alumnos, algunas son:

  - Ayudarles a que conozcan bien las redes en las que se mueven y el uso que pueden hacer de ellas. Así por ejemplo, los alumnos pueden utilizar listas de twitter (para amigos, intereses académicos y profesionales, información sobre becas y ayudas,...). Una buena forma de comenzar en el ámbito educativo es  Edmodo , una plataforma social educativa gratuita que permite la comunicación entre los alumnos y profesores en un entorno cerrado y privado, y a través de la cual se pueden compartir mensajes, archivos y enlaces, así como proponer tareas y actividades y gestionarlas. Este curso la he puesto en marcha con mis alumnos de ciudadanía, y tanto ellos como yo estamos muy satisfechos. Junto a esta herramienta utilizamos nuestro  blog de aula, en el que publicamos algunos de los trabajos que vamos haciendo y nos sirve como lugar de encuentro, ahí tenemos recursos, enlaces , juegos, entre otros.

  - Symbaloo , para recopilar recursos y organizarlos temáticamente. Así lo hemos hecho durante este curso para trabajar contenidos de internet y redes sociales en este symbaloo "Internet y redes sociales"


De esta forma concluyo mi artículo, con la esperanza de "aprender desde la infotoxicación a la gestión de la información"